La Mona Lisa

La Mona Lisa, también llamada La Gioconda, que significa alegre, fue obra de Leonardo Da Vinci entre los años 1503 y 1506. Algunos dicen que se pintó él mismo pero sin bigotes, barba ni cejas, en forma de mujer; o que pintó a su amada, o su vecina, esto nunca se supo, ya que al parecer nunca se terminó. En este retrato, la dama está sentada en un sillón y posa sus brazos en los apoyos del asiento. En sus manos y en sus ojos puede verse un claro ejemplo característico del esfumado y también puede destacarse el juego que hace con la luz y la sombra para dar sensación de volumen. El paisaje es inspirado en las vistas que Leonardo pudo alcanzar a divisar en los Alpes, cuando hizo su viaje a Milán. El personaje dirige la mirada ligeramente hacia la izquierda y muestra una sonrisa considerada enigmática. La posición de los brazos significa que está serena y que domina sus sentimientos. Giorgio Vasari (pintor, escritor y arquitecto de los años 1511-1574) dice que cuando la estaban retratando, tenían a gente cantando y tocando, y bufones que la hacían estar alegre.